La Pontificia Academia de Ciencias es miembro desde 1931.
La Pontificia Academia de Ciencias se originó en 1603 como Linceorum Academia, fue reorganizada en 1847 como Pontificia Academia dei Nuovi Lincei, y fue reconstituida con su nombre actual por el Papa Pío XI en 1936. Su objetivo es promover el progreso de la matemática, física y ciencias naturales y el estudio de problemas epistemológicos relacionados. Su trabajo es de alcance internacional y su membresía de 80 Pontificios Académicos es mundial y no sectaria.
La Academia realiza sesiones plenarias y organiza semanas de estudio y grupos de trabajo relacionados con temas de ciencia fundamental, problemas globales, política científica y bioética. Además, la Academia publica las Actas de sus propias reuniones y los resultados de las investigaciones científicas y los estudios de los Académicos y otros científicos. Otorga la Medalla Pío XI a destacados jóvenes científicos.