En mayo de 2024, el Consejo Científico Internacional (ISC) y la Oficina de Asuntos de Desarme de las Naciones Unidas (UNODA) recibieron conjuntamente una subvención de la Interfaz Científico-Política de Ginebra para fortalecer la Convención sobre Armas Biológicas (BWC).
Antecedentes
Esta iniciativa responde a la necesidad –destacada durante la reciente Conferencia de Revisión de la Convención sobre las Armas Biológicas– de integrar mejor los avances científicos en las operaciones de la Convención, en particular mediante mecanismos de revisión y verificación científica.
Fomenta la colaboración entre los delegados de la CAB y los expertos científicos mediante el desarrollo de metodologías que promueven el entendimiento y la confianza mutuos. Mediante debates específicos y productos de conocimiento a medida, la iniciativa busca dotar a los delegados de las herramientas necesarias para abordar las amenazas biológicas actuales y emergentes, fortaleciendo así el papel de la CAB en la bioseguridad mundial.
Actividades e impacto
- Mayo de 2024: Interfaz de política científica de Ginebra concede el premio para llevar a cabo el proyecto.
- Junio – Agosto 2024: El ISC Formularios un grupo de expertos que proporciona asesoramiento científico independiente.
- Septiembre-octubre de 2024: El Grupo de Expertos del ISC participa en el esfuerzo colaborativo para fortalecer la interfaz ciencia-política dentro de la Convención sobre las armas biológicas y toxínicas.
- 2024 de diciembre: El quinta sesión La reunión del Grupo de Trabajo sobre el Fortalecimiento de la Convención sobre Armas Biológicas tuvo lugar en el Palacio de las Naciones en Ginebra, Suiza, del 2 al 13 de diciembre de 2024 y contó con la presencia del Grupo de Expertos del ISC.
- En 2025, el ISC lanzará una serie de tres documentos de trabajo Ofrecen marcos integrales para fundamentar los debates sobre cumplimiento y verificación. Estos marcos abordarán las bioamenazas emergentes y propondrán un sistema de verificación ampliado. Basándose en la labor de comités anteriores, combinarán medidas in situ y externas, y aprovecharán tecnologías de vanguardia.
El proyecto finalizará en 2025.
Grupo de expertos del ISC